13.9.12

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Matahombres 2012

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Dentro de la línea de hacer cosas diferentes, sobretodo muy duras o directamente extremas, tales como la 101 de Ronda en 24 Horas,  Medio Ironman, Ascensión al Aconcagua....  nuestro amigo y compañero del C.E. Runners Río Turia, Aberto 101, se planteó hace unos meses hacer la MATAHOMBRES con unos intrépidos amigos.
Tras su participación, es un honor, para este blog, reproducir con su permiso, la excepcional crónica en la que nos cuenta su última gesta extrema.
Espero que os guste:
9 de Septiembre de 2012- Camarena de la Sierra. 
¿Y eso qué es?¿Y el nombre?¿MATAHOMBRES? Matahombres es una marcha cicloturista de bici de montaña que se realiza en la sierra de Javalambre. Son 76 km de bici de montaña por pistas, sendas, caminos y trialeras y está considerada como una de las mas duras de España . Y eso, a nosotros, nos pone.
Menudo perfil!!
 El nombre de Matahombres viene de una fuente por la que pasa la carrera pero me imagino que se escogió por que simboliza algo duro, extremo. Ahora os puedo decir que el nombre está bien escogido.
Los cuatro compañeros salimos el sábado por la mañana en una furgoneta VolkswagenTransporter en la que metimos las cuatro bicis, cascos, etc.  La misma furgoneta y los mismos 4 que participamos en los 101 de Ronda, cada uno en su modalidad.
nuestras campeonas cargadas en la furgoneta
Al llegar a Camarena de la Sierra nos esperaban unos amigos que nos hicieron una paella en un merendero junto a un río . La cosa empezaba bien. La paella empezó a las 2 y acabó pasadas las 8 y media que fue cuando llegamos a la casa donde teníamos que dormir. Una casa de pueblo en Valacloche, con mas de cien años, llena de habitaciones, recovecos y mucha historia. Una cenita en la cocina y de postre una queimada con su conjuro para alejar a los malos espíritus y a las meigas que nos rondarían al día siguiente. Como alguien nos comentó que la paella y la queimada no eran doping y habiendo dado buena cuenta de ambas, nos fuimos a dormir. 
La cabalgadura de Alberto 101.
Por la mañana nos pusimos en marcha y nos dirigimos a la salida. Mis compañeros  Jose, Arturo y Diego con unas bicis supercañeras, con doble suspensión, etc. Además son realmente buenos con las bicis. La mía es una buena bici pero tiene casi 20 años. Eso, a la postre, se notó y bastante .
  
Salimos de la plaza del ayuntamiento con sol y buen tiempo casi 700 ciclistas. El recorrido tenía forma de “8” , saliendo de Camarena y pasando de nuevo por el pueblo en el km 40. Esa era la mitad del recorrido. La segunda parte, los 36 km restantes era mas corta pero bastante mas dura tanto en desnivel (1.200 metros) como en las trialeras de subida como de bajada que, en gran parte, hice andando al quedarme sin frenos .

Los triatletas de Club RRT.
Mientras daba los primeros pedales me acordaba de mis compañeros del C.E. RUNNERS RIOTURIA que hoy, una gran parte de ellos, hacía el Triatlón de Valencia. Ricardo, Pedro, César, Lucas, Kike, Vicente, Miguelón, Máximo y todos los demás compañeros. Espero que les vaya a todos muy bien. Un gran club y unos grandes compañeros.
Los primeros 40 km los hice en 3 horas 13 minutos con sol y con terreno bastante sencillo técnicamente salvo una trialera de aproximadamente medio km en cuyo final esperaba una ambulancia de la Cruz Roja. Todo un detalle.
En mi caso , subo bastante bien pero bajo muy mal, porque tengo miedo a caerme y lesionarme. En el último año solo había cogido la bici de montaña para hacer una ruta en Buñol de 43km, subir a Rebalsadores en Naquera hace tres semanas y ahora, para hacer los 76. Aunque físicamente no tenía problema alguno, técnicamente iba muy mal preparado. Bajaba despacio y en todas las curvas me parecía que había gravilla o agujeros donde iba a meter la rueda delantera y salir volando. Para colmo, en el km 8 aproximadamente hubo un grave accidente ya que un participante de bastante nivel se estampó literalmente contra un árbol en una bajada. Cuando pasé por allí estaba siendo atendido por la Cruz Roja y tenía toda la cara ensangrentada, semiinconsciente y convulsionaba. En meta comentaron que lo evacuaron en helicóptero a Zaragoza . Ojalá esté bien y se recupere pronto.
Comienza a granizar.
Cuando participo en estas cosas voy simplemente a divertirme y a disfrutar con mis amigos. Como comentaron durante la maratón de Sevilla ¿para qué voy a correr mas si me van a dar lo mismo que al cuarto? Pero esta vez me equivocaba .
 Salimos de Camarena , pasamos por Riodeva y volvemos a pasar por Camarena. Km 40. El camino es precioso, con fuentes, bosques y naturaleza en estado puro. Puro y duro, que lo bonito cuesta.
Tras el primer paso por Camarena, abandonó bastante gente. La segunda vuelta, aunque eran 4 km menos, era un recorrido bastante mas duro y además se estaban formando unas nubes de tormenta realmente negras. La segunda parte te lleva en el km 62 hasta la cima del Pico Javalambre, a 2.020 metros, junto a la estación de esquí. De los 22 km del pueblo hasta la cima, 16 eran subida y ¡Vaya subida! Parte por pista y parte por sendas donde tuve que ir pie a tierra y en fila de a uno. Parecíamos una fila de hormigas , sudando y con la cabeza gacha. 
Granizo en las sendas de bajada.
En el km 55, después de escuchar varios truenos tremendos y de ver caer varios rayos como el que cayó a unos 50 metros de mi compañero Arturo. (¡Menudo susto!), empezó a llover. Normal, pues las nubes eran negras como el carbón y venían bien cargadas de agua. Lo que no fue tan normal fue el pedrisco que trajo. En esa zona no había ningún sitio donde guarecerse ya que por encima de los 1.800 metros, solo hay roca y arbustos. La única solución, apretar los dientes y pedalear. En un momento dado, arreció el pedrisco y empezó a hacerme daño en brazos y piernas. Eran del tamaño de garbanzos y realmente dolorosos. El casco fue fundamental. Tuve que pararme y, empapado de agua, ponerme la chaqueta fina que llevaba para ponerme una vez entrase en meta . Hacía bastante frío y me adelantaron 4x4 de la organización con gente dentro y bicis en los techos. Un todoterreno de la Cruz Roja me preguntó como estaba y les dije que mi idea era continuar. La gente no lo entiende pero es que a mi estas situaciones me molan. Me lo paso bien. Soy así.
Llegué a la cumbre del Pico Javalambre y de ahí, km 62, solo quedaban 14 km, la mayoría de bajada. Solo hubo dos problemas. El primero que me quedé sin frenos ya que en mi superbici llevo zapatas y con barro, se colapsan y no frenan. El segundo es que me esperaban las dos trialeras mas largas y mas duras que había visto en mi vida. Pero había algo positivo, después de una hora de tormenta con granizo, había dejado de llover . Solo quedaba frío y barro. De esto último, a mansalva .

Menuda granizada.
  Cuando llegué a la primera trialera, un miembro de la organización me dijo que mucha gente había ido por la carretera. La carretera hace zigzag hasta Camarena y las trialeras bajan en recto, cruzando el asfalto de vez en cuando . No me lo pienso y a por la trialera. Primer metro, resbalón y piñazo contra un pino. No me acordaba que no tenía frenos. Me levanto y al intentar ponerme de pié en esa pendiente me resbalo y me caigo de culo en el barro. Además me clavo el manillar en un costado.
Estaba sólo y cuando me recuperé seguí bajando con la bici en la mano y, en algunos tramos, montado y poniendo los pies en las ramas de los pinos para frenarme.
Como conozco la zona bastante bien no tenía ninguna preocupación. Aunque estaba sólo, estaba todo muy bien señalizado y sabía donde estaba y lo que quedaba hasta Camarena. Pensaba que detrás quedaban diez o doce participantes porque lo habían comentado en el avituallamiento del pico del Aguila, en el km 52. Realmente se habían retirado todos. Estaba solo y era el último, pero esto no lo sabía en ese momento.
Así que, poco a poco, fui bajando hasta la vega y de ahí hasta la meta solo quedaba un km. Iba bien de fuerzas pero el barro se había metido en el cambio y los piñones se me quedaron fijos.
Entré en el pueblo y el coche escoba se puso detrás ¿soy el último? La gente salió a aplaudir y entré en meta, besando el anillo y recordando a mi mujer sin cuyo apoyo no haría muchas cosas de las que hago. Casi ocho horas de pedales.
Al ir sin frenos, tuve que frenar con los pies pero la plaza estaba mojada por la lluvia y casi atropello al alcalde del pueblo que vino a felicitarme. ¡¡¡Uffff !!!. Por megafonía dijeron mi nombre y se acercaron un montón de personas a felicitarme . Especialmente MIS AMIGOS JOSE Y ARTURO QUE JUNTO CON DIEGO , compartieron esta aventura conmigo.
Recibiendo mi trofeo.
La llegada fue “triunfal” y muy divertida. Una señora de la organización se acercó y me dijo que tenía premio. Creí que iba de broma pero resultó que no. Me llamaron por megafonía y me hicieron subir al podium. Se acercaron un montón de personas y mientras el speaker decía mi nombre, me hicieron subir y me dieron un trofeo. Casi me caigo de lo que me estaba riendo. Toda la plaza con gente partiéndose de risa y yo el que mas. La señora se puso seria, me dio dos besos y el trofeo que veis en la foto.
Fue muy divertido. Los comentarios sobre lo que tenía en las entrepiernas fueron bastante elocuentes. Y cuando me felicitaban y me daban un palmetazo en la espalda me hacían temblar y no precisamente de emoción. Están fuertes los chicos de Camarena. 
Sonriendo para la posteridad.
Esta historia no puede terminar sin dar las gracias a la excelente organización, y a todos los voluntarios, las personas de los avituallamientos (había de todo y en cantidad: aquarius, coca cola, agua, tortas de tomate, de jamón, de cebolla, de chocolate y de manzana), miembros de Cruz Roja, Guardia Civil y Protección Civil que estuvieron por toda la carrera ayudándonos pese al agua y al granizo que cayó durante mas de una hora  a cerca de 2.000 metros de altura. Un 10 para todos ellos.
También a los dueños de la casa en la que dormimos, a los amigos que hicieron la paella y sobretodo a mis grandes amigos y grandes deportistas: Jose Diego y Arturo, que también terminaron la prueba, bastante delante de mi y con los que he compartido momentos que no olvidaré jamás. Sin ellos esto no habría existido.
Dos días de diversión y deporte que quedan en la memoria para siempre.
Un Abrazo,
Alberto 101.


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